“Un periplo inolvidable”
Aunque el título suene rimbombante y hasta rebuscado, el mismo obedece a una plática mitad broma, mitad despedida con un sabor amargo, esto debido a las condiciones del autobús en el que nos trasladaríamos a el puerto de Topolobampo, Sinaloa, ésta conversación fue sostenida entre nuestro coordinador de equipos especiales y su servidor, quien fungo como encargado del programa de futbol americano, cuando expresé la frase, Guillermo contestó: “¡A fregado, y eso qué es!?, entre risas comentamos el significado y afortunadamente cumplió con su cometido original; la singular frase se emitió en un afán de aligerar el sentimiento negativo que imperaba en todos los miembros del Staff y jugadores de los Coyotes que dignamente representan a la Universidad Tecnológica de Hermosillo, afortunadamente la rimbombante palabra, lejos de definir la aventura que implicaba viajar en malas condiciones, nos permitió establecer premonitoriamente lo que le esperaba a Coyotes: El Primer triunfo en su historia.
Aunque fuertemente apoyados por nuestra institución, el programa se sostiene en un 90% de los apoyos que los patrocinadores aportan al mismo, por lo que los esfuerzos de traslados se sostienen de lo que la iniciativa privada aporta. El viaje a la ciudad de La Paz, Baja California Sur, implicaba un reto para nuestra organización, no solo por su costo económico, además por el entramado logístico que implicaba. En primer término el costeo del viaje fue muy alto, el mismo equivale a tres juegos de visita por tierra (Tijuana, Mexicali y Ensenada), en éste caso o volábamos (económicamente inviable en ése momento) o viajábamos vía marítima por Ferry, en éste caso teníamos dos opciones: Guaymas - Santa Rosalía o Topolobampo – La Paz, se analizaron ambas opciones y la mejor fue cruzar el golfo de California desde el puerto sinaloense, sin embargo aunque viable dicha opción, aún faltaba lo más importante que era el pago del traslado, cantidad que se pudo conseguir apenas el mismo día de la salida, a través de préstamos, pago que se realizó a las 11:00 horas del mismo día en que pensábamos salir, y que se materializó no sin una dotación de adrenalina y desesperación por que no conseguimos las cantidades que se ocuparon. Ya habíamos conseguido lo que aparentemente era más complicado, el pago del barco, ahora se trataba de trasladarnos por tierra al puerto multicitado, mismo que se encuentra a 500 km aproximadamente de la ciudad de Hermosillo, y estamos comunicados por una autopista de cuatro carriles, según nuestro cálculo realizaríamos un total de 8 horas ya que viajábamos en autobús, tiempo suficiente en el que se contemplaban paradas de emergencia y de reabastecimiento de combustible; nuestro staff concluyó que la salida de Hermosillo debería ser a las 12:30 horas, lo que nos permitiría llegar al embarco sin problema y con cierto colchón de tiempo, el abordaje estaba programado a las 00:00 de ésa noche. Nuestras energías y atención se centraron sólo en conseguir los recursos para sufragar el pago del Ferry, no pusimos atención al medio terrestre que nos llevaría al puerto ya que dábamos por hecho el apoyo que nuestra institución nos brinda con los viajes por tierra, cabe aclarar que siempre nos trasladamos en los autobuses que tan entusiasmadamente pone a nuestra disposición la UTH, misma que como toda Universidad cuenta con compromisos académicos que al igual de los deportivos tienen que atender, es por ello que en ésta ocasión nos tocó que nos asignaran un transporte con condiciones no muy apropiadas para nuestro viaje ya que el autobús principal, que cuenta con el espacio y las condiciones apropiadas había sido asignado a un compromiso académico, de esto nos percatamos media hora antes denuestra partida y por casualidad; ya habíamos vivido un antecedente con el mismo transporte, puesto que en el nos trasladamos a nuestro primer juego de pretemporada en contra de Potros del ITSON en Cd. Obregón, viaje que es recordado por que nuestros jugadores se deshidrataron y el tiempo de traslado fue de hasta 6 horas, por lo que un viaje que doblaría la distancia y tiempo que precedió a éste compromiso, implicaba un situación no apropiada para nuestros estudiantes atletas; al enterarnos del uso del camión referido de inmediato, con apoyo del mismo personal universitario, nos avocamos a conseguir un autobús con condiciones más apropiadas para el viaje que realizaríamos, es importante resaltar que ya eras las 12:00 del mediodía y en 30 minutos estaba programada nuestra salida, la búsqueda del transporte presentaba un nuevo escollo, requeríamos crédito ya que no contábamos con recursos en ése momento para hacer frente al repentino costeo de la renta de un autobús. Durante aproximadamente dos horas y media intentamos infructuosamente de conseguirlo, ya sin esperanzas acordamos con el Staff que tendríamos que partir en el autobús asignado por la Universidad.
Partieron en punto de las 15:00 horas, si no tenían ningún inconveniente en la carretera y a una velocidad razonable promedio de 90 km/h llegarían con una hora de anticipación al embarque. Es importante mencionar que en el autobús viajaron el 100% de los jugadores, nuestro Head Coach Pedro Aguirre y el coordinador de equipos especiales Guillermo Lamadrid, el resto del Staff viajarían de la siguiente manera: El coordinador ofensivo Gamaliel Acuña, el coach de línea defensiva Luis Segundo y el coach de receptores Antonio López, además de uno de los miembros de la Fundación Coyotes, Ismael Gastélum, todos ellos saldrían en punto de las 9:00 horas del día 12 de septiembre del 2015 desde Hermosillo en vuelo directo a la cd. de La Paz; por otro lado, y debido al costo del boleto de avión el coordinador defensivo Jorge Pacheco y el coach de Linebackers Carlos Galindo, volarían de Cd. Obregón a La Paz, con escala en ¡Hermosillo!; además teníamos que coordinar con el Instituto Tecnológico de La Paz que nos hizo el favor a través del Coach Ortalejo de Lobos Marios de facilitarnos un autobús para traslados locales, en fin toda una odisea y un reto logístico que es muy característico de todos los equipos que participamos en la conferencia premier. Los muchachos partieron un poco frustrados y sin muchas ganas, uno de ellos nos dio de alta en un aplicación para Smart phones que permite por GPS observar su ubicación, de tal manera que desde Hermosillo, los coaches que se quedaron aquí los iban siguiendo, esto por el tiempo tan justo que llevaban para arribar.
La primera comunicación a partir de su salida fue hasta dos horas y media después que salieron, a través del Head Coach Pedro Aguirre e indicó: “apenas estamos pasando la caseta de cobro que se ubica en Guaymas”, es decir, dos horas y media y sólo habían avanzado 125 km, ya traíamos 1 hora de retraso, mientras tanto el coach Aguirre seguía intentando asegurar que por lo menos al regreso del viaje los pudiese esperar un autobús más apropiado. Siguiente comunicación se presenta a las 7 de la tarde, nos informaron que iban entrando a Cd. Obregón, que estaban haciendo fila en la caseta de cobro, y que ya llevaban 20 min. parados por la larga fila que había en la caseta de peaje, además de referir la gran cantidad de tráfico y tramos carreteros en reparación que aletargaban el tránsito de los vehículos, de cualquier manera, ya llevábamos dos horas de retraso. Se notaba la desesperación en nuestros compañeros del staff quienes veían cómo poco a poco se estaba complicando el arribo a la hora de salida del Ferry. Siguiente comunicación 9:15 de la noche, informan que están reabasteciéndose de Diésel en la ciudad de Navojoa, ya llevamos 3 horas de retraso, a ésa hora ya deberían haber llegado a Los Mochis, Sinaloa. Media hora después aparece mensaje del coach con un tono ya más desesperado solicitando que llamemos a Baja Ferris para que informáramos que llegábamos retrasados, nos avocamos a llamar, sin embargo por la hora ya no hubo nadie que nos respondiera. Siguiente comunicación a las 11:23 PM indicándonos que ya no llegaron pues aún estaban a 60 km de Los Mochis, Sinaloa, en ése punto el autobús viajaba a 50 Km/h según información de los propios jugadores, ahí caí en cuenta que en Sinaloa es una hora más por su uso horario, es decir ahí ya eran las 12:23 del día 12 deseptiembre. Intenté infructuosamente llamar una vez más a la compañía de Ferris, ante la imposibilidad de comunicarnos decidimos ya no mortificar ni agobiar al staff con la llegada a tiempo, por lo que en ése momento me avoqué a buscarles hospedaje cerca del puerto a efecto de realizar un eventual viaje el día sábado 12 de septiembre y tratar de convenir con el Coach de Lobos Marinos jugar el día domingo 13 septiembre; consulté la website de la compañía y para el aumento de mi angustia no había salidas el sábado de Topolobampo a La Paz los días sábados, busque´ salida desde Mazatlán, aunque eso implicaba más tiempo y dinero, pero de la misma manera no había salidas, ahí sentí que no había nada qué hacer, no teníamos dinero para tomar un vuelo y no había posibilidades de embarcarnos sin que transcurrieran por lo menos dos noches más. Conseguimos hospedarnos en Los Mochis e indiqué al Head Coach que era muy probable que se cancelara el viaje, que asumiríamos las consecuencias que nos indicara la liga y que me daba mucha pena por el esfuerzo tan grande que tanta gente había realizado para que estuviésemos jugando, sin embargo les solicité que esperara a las 10 de la mañana como máximo para que si la situación continuaba en el mismo estatus se regresaran a Hermosillo; sentí que no sólo se perdía el juego sino que tal vez el golpe anímico y de imagen iban a dar por terminado nuestro programa, me sentía muy mal y avergonzado, pasé en vela la noche pensando en todas las consecuencias que acarrearía nuestro incumplimiento. Avisé al resto del staff que viajarían vía aérea que suspendieran el vuelo, no habría juego; avisé también al Coach Ortalejo vía WhatsApp lo sucedido, me disculpé con él, y me puse a su disposición para asumir cualquier consecuencia que se derivara de lo sucedido. Avisé también al Ing. Antonio Falcón, a través de quien siempre nos hemos comunicado con la CONADEIP, hasta ese momento todo estaba perdido.
En punto de las 6:00 de la mañana del 12 de septiembre recibo llamada del Coach Ortalejo quien visiblemente preocupado me plantea diversos escenarios, pero ninguno era viable, inclusive analizamos la posibilidad de viajar en barco de carga, pero tampoco el sábado había salidas. Casi al finalizar la comunicación, me indica que si por que no vuelo desde Los Mochis a La Paz por medio de Aerocalafia, compañía que se enfoca a brindar sus servicios en el noroeste, le indique que no tenía dinero, esto implicaba por lo menos un aumento de en 100 mil pesos de costo, en fin, que no había posibilidad, me indicó que el hablaría con el administrador de la empresa, le indiqué que la única alternativa era que nos proporcionara crédito, en caso de negativa, no habría posibilidad alguna de acceder a viajar por aire. Me pasó el número del administrador general de la empresa, a quien paralelamente él ya le había enviado mensaje de texto por vía telefónica, y me instruyó a que también insistiera en el punto por el mismo medio. Colgué con el coach Ortalejo más desconsolado, pero tranquilo por el apoyo y comprensión recibido por mi compañero paceño, seguidamente me comuniqué con el Presidente de nuestra Conferencia, el Sr. Alfredo Escobedo, a quien le expuse lo sucedido e informé sobre la suspensión del encuentro, él lamentó la situación sin precedentes, sin embargo me conminó a buscar una solución que no afectara al resto de la liga, pero que de cualquier manera lo mantuviera informado sobre el avance de la atención al conflicto; colgué el teléfono y ya mi desesperanza era total: habrá que regresar a los muchachos desde Los Mochis, sin jugar, decepcionados, cansados, además de explicar a nuestra institución, patrocinadores, liga y medios de comunicación lo sucedido, un programa emergente como el nuestro no puede darse el lujo de no presentarse a un juego de visita, de ser así, seríamos los primeros en la historia de nuestra competición en hacerlo, ¡qué vergüenza!, pero las condiciones así estaba dadas.
En cuanto terminé de hablar con el presidente, recibimos mensaje del coach Ortalejo quien indicó con mucho entusiasmo que había contestado la persona de Aerocalafia, el Sr. Aldo Leyva, indicando que “jalaba”. Inmediatamente me comuniqué con él, amablemente dijo: “a nuestra empresa la encanta apoyar el deporte, cuenta con nosotros, te vamos hacer un buen descuento, y a cambio haznos el favor de presentar nuestra marca en tus juegos, pero me preocupa un poco lo del crédito”, le indiqué que en un momento le regresaba la llamada. Aproveché para verificar las tarifas que publica en suwebsite, con los precios aproximados y pensando que no me daría más alto de lo que se había publicado calculé el costo por el traslado, cantidad que aunque alta, factible de cubrir en las semanas subsecuentes, me comuniqué de inmediato con el Coach Carlos Galindo, preguntando que si era posible que cubriera con su tarjeta de crédito el costo, me indicó que sin problema, ¡me regresó el alma al cuerpo!, estábamos a poco de cumplir nuestro primero objetivo, que era presentarnos al juego, en ése momento el resultado deportivo era intrascendente. Antes que yo me comunicara me volvió a llamar el Sr, Leyva, ésta vez enlazado telefónicamente con el Coach Ortalejo y me indicó: “tengo 17 espacios para vuelo de Mochis a La Paz, ellos salen a las 18:30 y 23 espacios para Los Mochis – Cabo San Lucas y ése sale a las 13:30, ¿los tomas?, dubitativo le indiqué que sí, que en un momento me trasladaría a donde me indicase a cubrir la cantidad resultante, arropado por el apoyo del Coach Galindo; inmediatamente el Coach Ortalejo indicó que él nos conseguiría traslado de Cabo San Lucas a La Paz, una vez más nuestro compañero salió a resolver otro problema. Muy bien, dios está de nuestro lado, pensé, ahora, hay que negociar con la compañía de Ferris para que nos cambiaran el regreso de La Paz a Topolobampo para el día domingo a las 16:00 horas y avisar a los coaches para que programaron sus viajes de Hermosillo – La Paz, que hicieran lo posible por viajar; y por supuesto avisar a nuestro Head Coach de que si habría juego, ah! Y los coaches que viajarían vía Cd. Obregón, no, el caso de ellos estaba perdido, tuvieron que haber viajado a esa ciudad a las 3 de la mañana para tomar el vuelo a las 8:00 aproximadamente, pero ok, por lo menos allá teníamos a un coach especializado en ofensiva y otro en defensiva, lo que someramente nos permitiría hacer frente al esquema deportivo. Realizamos las llamadas y todo se reactivó con un gran algarabía, el problema es que ya eran las 8:30 de la mañana, el vuelo desde Hermosillo que trasladaría a los coaches saldría a las 9:00, “a ver si alcanzan a llegar” comentó el Coach Galindo quien ya me acompañaba al aeropuerto de Hermosillo para cubrir el costo del vuelo; cabe mencionar que Carlos Galindo prácticamente estaba recién levantado y así me acompañó.
Llegamos al aeropuerto a las 8:45, nos encontramos documentando a Ismael Gastélum quien sí había alcanzado a llegar, conversamos con él sobre lo sucedido, inmediatamente después me dirigí a una señorita muy amable que nos atendió con gusto, le indiqué a lo que iba, me dijo que ya estaba cerrando el vuelo de Hermosillo – La Paz, que le permitiera terminar de documentar a Ismael para que procediera a atendernos. Le indiqué que había tres personas que venían en camino, que si pudiera aguantar tantito el cierre del vuelo nos ayudaría mucho el que pudieran abordar, me preguntó amable pero tajantemente: “¿ya vienen?”, le contesté un poco apenado pero regándole nos esperara: “deme un segundito, les llamo y le indico cuanto les falta para llegar y así toma la decisión de cerrar el vuelo”, en ése momento el Coach Galindo despedía a Ismael quien corriendo fue a abordar pues ya estaban anunciando el vuelo, por favor llama a los coaches para checar si llegan, realizó la llamada y estaban a 5 minutos de llegar y afortunadamente venían juntos, se lo indicamos a la señorita quien hasta un poco divertida con la situación accedió a esperarlos de muy buena gana. No habían transcurrido los 5 minutos cuando llegaron los coaches Gamaliel, Luis y Antonio, corriendo y con sus expresiones animadas por que se materializó el juego, pero agobiados por el cumulo de situaciones que se definieron en tan poco tiempo, de hecho el vehículo del Coach Gamaliel sólo lo estacionó sin verificar si lo podía dejar ahí o alguien lo recogería, en el apuro, le pidió al Coach Galindo que se lo llevara a su esposa, apenas alcanzó a decir esto y escuchar que sí, para salir como bólido corriendo al abordaje. Nuestra compañera veía divertida toda la situación, en eso me dice Carlos Galindo “llamó el coach Pacheco que si se viene para que tratemos de subirlo en éste vuelo”, yo indiqué: “ya va a despegar, no alcanzará”, otra vez más como por obra del cielo anuncian que el vuelo se había retrasado cuarenta minutos, y es en ése momento cuando el Coach Galindo indicó: “ya hubiera ido por mis cosas y también trato de abordar, de todos modos mi viaje está totalmente pagado”, yo con cara de oportunidad le indico: “arráncate a tu casa, yo mientras tanto trataré de convencer a la compañía para que puedan viajar tú y Pacheco” y como cohete salió disparado a recoger sus cosas a su casa, un poco preocupado de que solicitaran el pago del vuelo de los muchachos que estaban en Los Mochis, tranquilizándolo le comenté que eso podía esperar ya que primero tendrían que atender el abordaje y despuésatendernos. Ya eran las 9:30 y ni luces del personal dela aerolínea para poder negociar la situación de los coaches que debieron salir de Cd. Obregón, y me acuerdo que Ismael Gastélum está en la sala de abordaje en compañía del personal de la aerolínea, le llamo por celular, le explico situación, y le indicaron que tendrían que solicitar la aprobación, pero como el vuelo tenía aún capacidad, era muy factible la petición. 9:40 y apareció la señorita con su buena actitud y me solicitó el nombre de los que viajarían desde Mochis hasta La Paz y Cabo San Lucas, el coach Aguirre previamente me envió el listado que yo con paciencia y hasta aletargado le dictaba a la señorita para según yo ganar un poco de tiempo a efecto que pudieran llegar los que faltaban. Terminamos y no llegaban, la presión volvió a subir, al mismo tiempo me llamaban de La Paz para coordinar el autobús que recogería al grupo de Cabo San Lucas, recibiendo llamadas de la compañía de Ferris confirmando el cambio, y llamando a los que estaban por llegar. Afortunadamente, llegaron a tiempo, autorizaron el cambio, y de repente estábamos ante la situación que todo el staff estaba completo. Se realizó el pago de los viajes con origen en Los Mochis y misión cumplida, en menos de 3 horas pasamos del ostracismo a lo sublime, no cabía en mí, aunque accidentado, pero vamos a cumplir!!. Informamos a todos los entes involucrados, liga, padres, y sobre todo a nuestros campeones que aguantaron estoicos en Los Mochis.
Ya eran las 11:00 horas, ahora habría que asegurarnos que los jugadores llegaran al aeropuerto de Los Mochis, no había caído en cuenta que para muchos sería la primera vez que volarían, me estremeció positivamente ésa imagen, que bueno que ésta situación tan inesperada produjera tan trascendente evento. Llegaron sin problemas, la delegación sería encabezada por el Coach Guillermo Lamadrid con quien finalmente viajarían 16 jugadores con destino a Cabo San Lucas. A las 11:30 hora de Hermosillo, me avisaron los Coaches que ya habían llegado a La Paz, sentí mucha tranquilidad, pero ahora desde Hermosillo tendríamos que coordinar tres grupos que se segmentaron en tres ciudades: Los Mochis, Cabo San Lucas y La Paz. A los Coaches los estaba esperando una comitiva del staff de Lobos Marinos quienes amablemente los recibieron y los movilizaron, trasladaron a la comitiva a su hotel, con lo cual me relajé un poco ya que tendríamos quien resolviera directamente cualquier problema que se suscitase desde La Paz. Cabe decir, que su servidor me encontraba coordinado a un Electricista y a una empresa patrocinadora de Coyotes, Electrosistemas Mexicanos, quienes estaban redirigiendo las luminarias del estadio en donde recibimos como casa ésta temporada. A los pocos minutos, me informa el coach Guillermo Lamadrid que estaban aterrizando en Cabo San Lucas, que si en donde estaba el autobús, sin embargo se habían equivocado y él transporte se encontraba en San José del Cabo, por lo que habría que esperar media hora más para su arrivo. Con entusiasmo y resignación recibe la noticia y me indica mediante mensaje de WhatsApp; “Coach se cumplió su augurio”, contesto: ¿acerca de qué?, “un periplo inolvidable”! “pero además es un periplo sushi” insiste Guillermo, ¿y eso por qué?, cuestiono, “es que el viaje será cielo, mar y tierra”, ambos realizamos manifestaciones de alegría y por mi parte solté una gran carcajada. Llegaron por ellos en un autobús para 48 personas, de modelo reciente, con aire y asientos reclinables, todo un lujo en estos momentos. Por supuesto que es de esperarse el trayecto, cómodos y con un chofer que se portó muy amable, fungiendo hasta de guía de turistas, los llevó a visitar el famoso Hotel California que se ubica en la localidad de “Todos Los Santos”, lugar cien por ciento turístico y que contribuyó al buen ambiente que ya prevalecía entre el grupo de jugadores.
Por otro lado, 17 miembros de nuestro equipo aún seguían en Los Mochis a la espera del vuelo que directamente los llevaría a La Paz, el grupo era encabezado por el Coach Aguirre, su abordaje estaba programado en punto de las 6:40 PM, para arribar a las 7:30 aproximadamente, aprovechamos que el autobús proveniente de Cabo San Lucas arribaría cercano a ésa hora, de tal manera que en vez de dejarlos en el campo de juego el chofer fue directo a recogerlos al aeropuerto, por fin, 28 horas después de su salida todo el equipo estaba reunido y listo para el juego. Pero la serie de decisiones tomadas derivaron en que tendríamos que invertir una noche adicional dehotel, más tres comidas, más unanoche adicional del chofer y autobús que nos esperaba en Los Mochis, y una vez más el Coach Ortalejo salió a nuestro rescate ofreciéndonos hospedaje en convivencia con los jugadores de Lobos Marinos, en fin todos nuestros problemas encontraron solución gracias a la buena voluntad y compañerismo de nuestros amigos paceños.
El resultado deportivo no era muy relevante, de hecho por el largo trajín del viaje, y los antecedentes del equipo contrario, esperábamos solo cumplirles, competirles dignamente y regresar a casa con la satisfacción de la labor cumplida. Sin embargo una variable con la que no contábamos es que lejos de que el ánimo de nuestros coyotes amainara, la aventura los motivó más, se vio un equipo integrado, resuelto, y gracias a dos corridas de Daniel Casteleiro, con dos puntos extras buenos del kicker Carlos Mejía, y una férrea defensiva que no permitió anotación desde el primer cuarto, Coyotes de la Universidad Tecnológica de Hermosillo, hizo historia logrando su primer triunfo.
EPÍLOGO: Al momento de la redacción del presente nuestros Coyotes se encontraban en Cd. Obregón aún en viaje de regreso a casa, previo a ello tomaron por fin el Ferry, sólo que de La Paz a Topolobampo, en donde eran esperados por nuestro querido “Goldo”, chofer de la UTH.
DATOS:
Duración del viaje en total: 2 días, 19 horas.
Tiempo de viaje terrestre: 20 horas tramo Hermosillo – Topolobampo – Hermosillo. 3 horas Cabo San Lucas La Paz. 3 horas Cd. Obregón – Hermosillo para el grupo que regresó el domingo vía aérea.
Tiempo de viaje aéreo: 4 horas de vuelo: Hermosillo – La Paz, Los Mochis – Cabo San Lucas, Los Mochis – La Paz, La Paz – Cd. Obregón.
Tiempo de viaje vía marítima: 7 horas, La Paz – Topolobampo.
Personas que realizaron el viaje: 35 jugadores, 8 Coaches, 1 papá, y 1 empleado de la UTH.
Kilometraje recorrido por tramos: Tramos Hermosillo – Topolobampo - Hermosillo: 1000 Km; Tramo Los Mochis – La Paz – Los Mochis: 504 km; Tramo Los Mochis – Cabo San Lucas: 414 km; tramo Cabo San Lucas – La Paz: 157 Km; Tramo Hermosillo – La Paz: 735 Km; Tramo La Paz – Cd. Obregón: 483 Km; tramo de Cd. Obregón – Hermosillo 252 Km.
Total del kilometraje recorrido por al menos uno de los miembros de Coyotes: 3,542 km.
Medios de transporte utilizados por tramo: Autobús Hermosillo- Los Mochis Hermosillo, compañía UTH; Avión Los Mochis - La Paz, Los Mochis – Cabo San Lucas, Hermosillo – La Paz y La Paz – Cd. Obregón, compañía Aerocalafia; Autobús Cabo San Lucas – La Paz, compañía Satélite; Autobús en La Paz, compañía Instituto Tecnológico de La Paz; Ferry La Paz – Topolobamo, compañía Baja Ferris.
Comidas: 8 comidas para 40 personas: 320 raciones.
AGRADECIMIENTOS ESPECIALES: Al Coach Ortalejo de los Lobos Marinos del Instituto Tecnológico de La Paz, por su gran compañerismo y solidaridad, su staff y las familias que amablemente acogieron a nuestros jugadores. A Aerocalafia, quien con su apoyo pudo materializar el viaje. A Ismael Gastélum, fiel fan de los coyotes y solucionador profesional de problemas. El Coach Pedro Aguirre, por su paciencia, entusiasmo y pasión por lo que hace. La UTH, sin nuestra noble institución jamás hubiéramos podido vivir estas experiencias. Nuestros Staff quienes a última hora modificaron hasta tres veces nuestros planes de viaje. El coach Carlos Galindo por su irrestricto apoyo. A nuestros patrocinadores porque con su confianza hacen posible el crecimiento exponencial como seres humanos a todos los miembros de nuestro programa. Al rector de nuestra Universidad, el Ing. Juan Gym Nogales, quien a pesar de los tiempos inestables se ha mantenido firme en nuestro proyecto, asumiéndolo como suyo y llevando hasta las últimas consecuencias su coherencia institucional. A los padres, hermanos, hijos, esposas, novias y amigos de los integrantes de nuestro proyecto, quienes con su cariño le dan sentido a nuestro quehacer diario. A nuestros choferes, el “Goldo” Leonardo Benítez y al que nos trasladó vía Cabo San Lucas – La Paz, nuestro agradecimiento total. A nuestro presidente Alfredo Escobedo, por estar al tanto y ofrecer su apoyo para el buen término de nuestro viaje. Y finalmente al coach Guillermo Lamadrid quien con gran humor y humanidad, sin saberlo tituló nuestra crónica.
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