Son las 5 de la mañana y el despertador de Rubén Zendejas (Corredor #40 de los Leones) suena sin parar. Seguramente podría dormir una hora más antes de entrar a su primera clase en la Universidad, pero no, un campo lleno de yardas y muchos amigos que a hora son sus hermanos lo están esperando.

Rubén sube a su coche y se dirige a la Cueva del León. El trayecto no es tan largo, pero la desvelada de la noche anterior por terminar tareas y trabajos lo hacen interminable. Por fin está cerca y los reflectores del estadio se ven desde la entrada de la Universidad. Ya casi son las 6 de la mañana, el entrenamiento está por comenzar…

Este será el segundo año de Liga Mayor para Rubén Zendejas, y su cuarto semestre de Medicina ya ha comenzado, donde buscará especializarse en cardiología pediátrica. No es necesario mencionarlo, pero estudiar medicina requiere mucho tiempo y dedicación, algo que Rubén contempló antes de decidir si quería interrumpir su vida como estudiante-jugador y dedicarse sólo a lo académico.

Con esta temporada, Rubén estará cumpliendo 14 años jugando Football Americano, deporte que le ha permitido vivir grandes experiencias, tales como ser seleccionado nacional 3 veces (Kuwait, Tijuana y Monterrey), ser novato ofensivo del año (Temporada 2015) con los Leones de la Anáhuac, y MVP por la prensa mexicana, también en 2015.

Sin duda Rubén es pieza clave en la Ofensiva de los Leones, donde su desempeño y liderazgo lo llevo a convertirse en Capitán para esta temporada junto con Ulises Loya (Linebacker #55). Para la selección de los capitanes, el Head Coach Willy Valdovinos junto con el Director de Deportes Javier Martínez, diseñaron el Modelo Anáhuac que ha servido para medir el desempeño de cada jugador dentro del programa, y este se divide en 4 vértices: Lo espiritual, lo académico, lo físico y lo deportivo.

Los jugadores son pasados por estos 4 filtros, y los que cumplan en mayor y mejor medida serán elegidos como dignos representantes de la Universidad Anáhuac y de la capitanía del equipo. No podría hacerse de otra manera, pues de acuerdo con la calificadora británica Quacquarelli Symonds (QS), la Universidad Anáhuac se encuentra dentro de las mejores Universidades del País, y bajo está métrica se está buscando mejorar el resultado deportivo de manera constante.

Si bien se busca que el desempeño de los jugadores sea el óptimo, también es necesario mantener un buen avance académico para poder estar dentro del roster de jugadores, pues la CONADEIP está muy comprometida con el desarrollo académico de todos sus atletas, y el no tener un avance académico semestral puede impedirte entrar al campo de juego.

Rubén está consciente de ello, y es por eso que trata cumplir académicamente de la mejor manera posible. Comenta que la mayor parte de sus tareas y trabajos los hace en sus descansos, o cuando tiene horas libres entre cada clases. Si no es posible hacerlo de esta manera, siempre podrá hacerlo antes de dormir o los fines de semana, especialmente los domingos que no hay juego. Así es como Rubén actualmente mantiene un promedio de 9.2, logrando una simbiosis académica-atlética.

El programa de los Leones es relativamente nuevo, pero los objetivos que se quieren lograr están bien definidos. Se busca un campeonato y seleccionados nacionales, pero también se quiere traer talento deportivo y académico, pues la meta es que todos los jugadores terminen sus estudios a la par de su elegibilidad en Liga Mayor. Los coaches y los directivos están muy comprometidos con el nivel académico que tienen los jugadores, pues la misión de la Universidad Anáhuac es desarrollar personas a nivel académico, social y espiritual, que no es otra cosa que ser Líderes de Acción Positiva.

Rubén espera poder conseguir un campeonato, y tratará de dejarlo todo en el campo en esta campaña, pues por situaciones académicas es muy probable que esta sea su última temporada como León.

…Un día de entrenamiento, escuela, gimnasio, amigos, trabajos y tarea ha terminado, pero sólo por hoy. La temporada apenas está por comenzar y aún queda mucho por hacer. El reloj ya marca las 11 de la noche y obliga a Rubén ir a la cama, pues mañana es muy probable que el día le exija más de lo que se puede imaginar.

Jugar Football Americano en la Universidad es un privilegio, pero no sólo se trata de anotar touchdowns, tacklear, lanzar o recibir pases, es más que eso. Se trata de ser integral en la escuela y en el campo, estar orgulloso de tus colores e institución, querer a tu familia, apoyar a tus amigos, estar agradecido con todos los que nos permiten hacer lo que más nos gusta, y sobre todo saber que tu familia es más grande de lo que pensabas y que cada fin de semana estarás defendiendo su honor en las diagonales. Eso es ser un LEÓN.

#FeartheLion