Para Drake el Kili Bowl

Por: Martín Contreras

Víctimas de sus errores en los momentos puntuales, donde estaba en dominio del juego, La Selección Nacional de la Liga Premier de la CONADEIP perdió 17-7 a la Universidad de Drake de la División 1A de la NCAA, en el Kilimanjaro Bowl que se llevó a cabo en Arusha Tanzania, con una entrada de 12 mil espectadores en el Estadio Sheikh Raid.
 
Dos balones sueltos, dos centros malos cuando estaban intentando goles de campo de 42 y 25 yardas más una intercepción, fueron los puntos fundamentales para que los norteamericanos aprovecharan sus oportunidades y se llevaran el triunfo, ante un rival que tuvo dominio en las estadísticas y la trinchera.
 
Previo al partido se llevó a cabo una ceremonia con la presencias de los Embajadores de México, Luis Javier Campuzano, de los Estados Unidos Alfonso Lenhardt y de funcionarios del Gobierno de Tanzania, que tuvieron palabras de elogio por el primer partido oficial de Futbol Americano que se juega en el Continente africano.
 

La semilla que dejaron norteamericanos y mexicanos en Tanzania, se observó con la presencia de 5 mil niños en las tribunas y de un mini juego en el medio tiempo entre los nuevos jugadores de Futbol Americano.
 
En el juego el corredor José Reyes Conn anoto un touchdown, gano mas de 100 yardas y fue reconocido por varios jugadores de los Bulldogs al final.
 
PRIMER CUARTO
 
México inició con nervios el juego, cometiendo errores que los metieron en su campo durante el primer cuarto, pero también su defensiva se fajo al detener en primera y gol en la yarda tres al rival, aunque finalmente un gol de campo de Billy Janssen de 25 yardas puso adelante a su equipo 3-0.
 

En ese periodo la ofensiva nacional no pudo producir ningún primero y diez, luciendo la falta de ritmo, aunque el mariscal de campo José Alberto Ortiz tuvo algunos destellos importantes.
 
Para el segundo cuarto, las cosas empezaron a cambiar, porque la defensiva mexicana sacó por lesión a los pasadores Michael Piatkowski y Tyler Castro, por lo que entró Nick Ends a comandara el ataque, sin embargo no pudo tomar el control del juego por la presión del rival y los norteamericanos empezaron a  ceder posición de campo.
 
Al establecer el juego por tierra, por un trabajo destacado de su línea ofensiva, México tuvo el control del partido, sin embargo en dos momentos cometió errores que impidieron que tomara ventaja, primer en un intento de gol de campo  de 42 yardas, vino un centro corto por lo que Erik Gómez no pudo patear, más tarde cuando estaban en la yarda 15 apareció un balón suelto que los dejo en desventaja al finalizar la primera mitad.
 
En el tercer cuarto, el momento del juego continuo con México, a la ofensiva entro Dwein Juárez al salir semi conmocionado José Ortiz sin desentonar, porque en la trinchera hacia ambos lados del balón seguía ganando la Selección, minando la resistencia física del rival que resintió el golpeo y la altura de Arusha.
 
Sin embargo no pudieron concretar hasta en la segunda jugada del último cuarto, cuando Reyes Conn anoto en carrera de 8 yardas que sumados al extra de Gómez dejaron el partido 7-3 en su favor, en ese momento Drake despertó y cuajo su mejor ofensiva del partido, al recorrer 70 yardas para culminar el ataque con pase de 8 yardas de Nick Ends hacia Joseph Orlando, para irse 10-7.
 

Con más de 10 minutos en el reloj, los mexicanos volvieron al campo con la mira en darle la vuelta otra vez, y su ofensiva terrestre funciono, de hecho en una carrera de 35 yardas donde se había quitado a los defensivos, José Reyes Conn cayó en un hoyo del campo y se quedó en la yarda uno de Drake.
 
Desde ese lugar México no pudo anotar al ser detenido en tres carreras por el centro y en la cuarta buscaron empatar, sin embargo vino otro mal centro y no hubo puntos.
 
Luego de que la defensiva detuvo a Drake, la ofensiva volvió a fallar, con un balón suelto que dejo a Drake con todas las ventajas para que en carrera de cuatro yardas anotara Patrick Cashmore para dar la puntilla.
 
Al final del juego los dos equipos recibieron un trofeo majestuoso, que fue entregado por los embajadores Luis Campuzano de México y Alfonso Erhardt de los Estados Unidos más el reconocimiento, por dejar la semilla del Futbol Americano en Africa.